ARTE Y EDUCACIÓN

He visto fuera de clase esta película, que está a medio camino entre la ficción y el documental y narra la vida cotidiana de una clase de instituto francesa. He podido compartir con mis compañeros sólo una clase dedicada a exponer sus preguntas realizadas en parejas en relación a la dimensión formal del film, así como nuestras perspectivas sobre la educación hoy día.

Aquí van mis dos reflexiones en cuanto a la dimensión formal y conceptual del elemento visual examinado en clase:

DIMENSIÓN FORMAL:

La película de Cantet, Entre les murs, pretende captar la realidad de un aula en una escuela de París. Rodada a modo de documental, con cámara al hombro, quiere dar más verosimilitud al guión que siguen estos jóvenes actores no profesionales. Se han utilizado cámaras caseras, un formato apaisado, ausencia de música, apariencia de caos, tensión y agobio, ya que se escucha los sonidos/ruido típico de una clase...

Evidentemente, los actores siguen un guión, pero en cierto modo, hay algo azaroso...Los actores interpretan el papel de ellos mismos y eso les permite salirse del esquema que tienen marcado, improvisar, y así hacer más real este "drama social" que están interpretando.

Por otro lado, se aprecia en el aula una multiculturalidad que es fuente de enriquecimiento pero a la vez de un gran conflicto entre profesorado y alumnos, forzando más las relaciones entre ellos y dándose la vuelta constantemente las situaciones.

Todo ocurre en tres escenas diferentes: la clase, el pasillo y patio del instituto y las salas de profesores. Esto hace que el propio espectador se sienta, a veces, limitado, encontrándose siempre en ese espacio tan cerrado, que da mayor fuerza al título que lo enmarca de encontrarse entre muros y con mayor razón si dentro de ellos se dan curcunstancias que te mantienen en continua tensión.

Analizándolo un poco más, veo que la escuela está en buenas condiciones de infraestructura. Tiene buenos espacios para debate y directivos, adelantos tecnológicos a disposición del alumnado...Me llama la atención al ser esta cuestión una justificación en algunos centros en uno y otro país de la calidad de la enseñanza impartida.

DIMENSIÓN CONCEPTUAL:

La sensación que me da es que en el documental se pretende dar una imagen cercana del profesorado, al menos en la figura del profesor Marin. El ambiente de la clase es complicado, como en gran parte de las aulas de cualquier centro educativo en la actualidad. Presenta a jóvenes que no hacen fácil impartir una enseñanza, ni siquiera intentando hacer las clases más dinámicas, dando voz a los alumnos, planteando debates con cualquier pretexto dentro de un temario a seguir...No es fácil prestar atención. Es complicado hacerlo varias horas seguidas a la vez que son escasas para que se conozcan entre ellos, establezcan lazos de unión que hagan cuestionarse valores que vayan desde el aprendizaje hasta la amistad y el respeto. 

La multiculturalidad es una riqueza (como he dicho anteriormente) pero como en este ejemplo, también fuente de conflicto, no hay igualdad de raza y en ocasiones puede desembocar en racismo. Pienso que influye muchísimo el tipo de alumnos que existe, con unas necesidades concretas bien diferentes a otros en carencias...Hoy día ocurre algo muy parecido y sí podría decir que esta es la tónica general en las aulas de secundaria y primaria, más recientemente. Es un dilema para el profesorado idear nuevos sistemas de aprendizaje que resulten atractivos y aun con esto no es suficiente. La actitud del profesor, aunque creativa y tolerante, se ha convertido en un desafío y los alumnos parecen detectar con inteligencia las debilidades de los que enseñan y utilizarlos a veces en su contra generando malinterpretaciones. Los conflictos del aula son un espejo de la vida de sus alumnos fuera de ésta con todo el impacto emocional que conlleva. 

Ofrece una enseñanza como un laberinto, no aparece un final. Todo tiene cabida: el sentimiento de frustración, la incomprensión a la vez que la sorpresa...

Trailer "Entre los muros", Laurent Cantet

He encontrado una relación entre esta película y otra realizada por la escuela francesa de los años 40: "Los 400 golpes", de François Truffaut. Muestra una institución extraordinariamente rígida, con jerarquías inflexibles, gélidos métodos de enseñanza y castigos severos, cuyos niveles de autoritarismo en las aulas entra en contraposición con los alumnos de "Entre los muros".